Por: Alejandro Carbajal
En todas las etapas de crecimiento, desde la conformación de la idea, la puesta en marcha o hasta alcanzar una inversión, las startups enfrentan situaciones que perjudican su evolución o las conducen al fracaso.
“En la industria de las startups hay fallos, errores y también pecados que todos cometemos… La mayoría de los casos que se observan en el ecosistema de México tienen que ver con temas de administración, finanzas y métricas de los negocios”, explica Israel Cerda de la Garza, socio de la firma G2 Consultores.
El Instituto del Fracaso señala que las cinco causas de fracaso en los negocios en México son: ingresos insuficientes para subsistir, falta de indicadores, no contar con un proceso de análisis, planeación deficiente y problemas en la ejecución.
“La habilidad y disposición de los emprendedores para acercarse con asesores y expertos que les ayuden y los guíen en su crecimiento puede brindar herramientas necesarias para el crecimiento del negocio”, recalcó Israel Cerda de la Garza.
En este sentido, G2 Consultores comparte una lista de los principales pecados que las startups deben evitar:
No reclutar el talento adecuado
No identificar objetivamente las necesidades del capital humano es un pecado en el ecosistema emprendedor, ya que para avanzar en las distintas etapas de crecimiento de una startup se requieren conocimiento y habilidades específicas en el equipo. Por ejemplo, el director de tecnología (CTO) que generó el MVP (Minimum Viable Product) en una empresa de software, requiere escalar sus capacidades para participar proactivamente en el crecimiento esperado después de una ronda de inversión Serie A, y aunque resulte difícil en ocasiones, es necesario realizar ajustes en el equipo si se detecta que el talento no es el adecuado para el objetivo.
Subestimar el valor de las personas
Uno de los pecados más recurrentes que cometen los emprendedores, es no reconocer las aptitudes de sus colaboradores o suponer que ellos solos tienen la capacidad para realizar todos los procesos de la compañía, subestimando el valor que cada miembro del equipo aporta al crecimiento. La confianza en el equipo permite a los líderes enfocar su atención a actividades críticas como planear la consolidación de la startup y de paso ampliar sus habilidades empresariales.
No escalar el equipo
No analizar la carga de trabajo impide determinar el momento adecuado para integrar nuevo talento o capacitar a determinadas áreas de la organización, provocando falta de agilidad que limita el crecimiento de la empresa. Para alcanzar los objetivos de la empresa, se requiere una organización balanceada con metas definidas y personal suficiente para ejecutar las tareas claves.
Por ejemplo, al crecer la cartera de clientes podría requerirse fortalecer el área de operaciones para brindar un servicio adecuado.
No estandarizar los procesos
En etapas tempranas, cada área implementa sus propios procesos de trabajo y entregan resultados sin problema; sin embargo, cuando la operación aumenta o el equipo crece, resulta más complicado mantener la productividad y la competitividad. Estandarizar los procesos del negocio sirve como guía para todas las áreas, optimiza el tiempo de trabajo y los recursos económicos. Los roles de cada trabajador deben estar claramente definidos, así como sus responsabilidades, de esta manera es mucho más fácil llevar el control de cada departamento.
Falta de planeación de flujos de capital
Ser demasiado optimista al momento de pronosticar los ingresos del negocio es de las principales causas de fracaso de una startup. Las fases de crecimiento de las startups están planeadas en lapsos de 12 a 18 meses, mismo tiempo en el que el capital debe ser administrado hasta a la nueva ronda de inversión. No ejecutarlo de esta manera, motiva a buscar financiamiento de forma impulsiva, provocando la disminución de la participación accionaria, recolección de inversiones sin control y desincentivando futuras rondas.
No conocer la salud de la startup
Durante las etapas tempranas, las startups cometen el error de dar seguimiento solo a algunos indicadores como ingresos y clientes. Sin embargo, existen otras métricas que revelan el desempeño de manera más amplia y permiten trazar estrategias de mejora, como la medición del burn rate, alcance del posicionamiento, retención de clientes, calidad en el servicio. Definir y monitorear regularmente los indicadores clave de la industria acorde a tu modelo de negocio te permitirá conocer el estado de tu emprendimiento.
Falta de un gobierno corporativo
Usualmente antes de alcanzar una inversión Serie A, las startups desestiman la conformación de un gobierno corporativo; sin embargo, implementar prácticas como sesiones de consejo y rendición de cuentas fortalece la confianza de los futuros inversionistas, el camino hacia más las fuentes de capital necesarias para el crecimiento de la compañía.