Lo que debes de tomar en cuenta para Franquiciar tu negocio.

Hay algo que no puede faltar en cualquier emprendimiento: Perseverancia. Esta es una de las lecciones que la película The Founder (El Fundador) nos enseña; además de cómo un pequeño negocio familiar logro revolucionar la industria de la comida rápida.

Los hermanos McDonald crearon un innovador sistema que en conjunto con su modelo de negocio, creo un valor agregado a su marca, distinguiéndolos de la competencia. Su sistema se basaba en nuevas herramientas inventadas por ellos mismos, que les permitían producir en cadena, y de esta manera reducir el tiempo de espera del cliente.

Todo esto les costo mucho trabajo, pues no solo analizaron otros negocios, sino que tuvieron que hacer varias pruebas para obtener lo que realmente funcionaba para ellos, y aún cuando tuvieron varios fracasos, no se dieron por vencidos y perseveraron para consiguieron el negocio de su sueños.

Ahí es donde llego Ray Kroc con la idea de expandir el negocio a varios estados. Esta vez los hermanos McDonald habían aprendido su lección y decidieron firmar un contrato de franquicia, con reglas que les permitían tener el control en la toma de decisiones de su empresa.

La Franquicia es una figura comercial que permite a una persona (Franquiciatario) explotar la marca que le pertenece a otra persona (Franquiciante), por tiempo determinado a cambio de una contraprestación.

La Franquicia sin duda era una excelente oportunidad para la visionaria mente de Ray, por que representaba varias ventajas:

• Era ya una marca con renombre
• Aseguraba el éxito de su negocio, ya que era un producto aceptado en el mercado.
• Tendría acceso al “Know-How” de los hermanos McDonald, así como a su innovador sistema.

Pero algo que debes tomar en cuenta a la hora de franquiciar tu negocio o comprar una franquicia es que ambas partes deben tener la misma visión de negocio y ser compatibles profesionalmente ya que comparten una marca y la reputación de esta.

Pero para McDonald´s no funciono esta asociación, los hermanos y Ray tenían visiones diferentes de lo que debería ser el negocio, el crecimiento y las ganancias que esperaban. Y al final Ray se convirtió en el dueño de la marca, creció su imperio a varios países, siendo hoy una de las cadenas de comida rápida más grande del mundo.

Pero con esta historia hay varias lecciones que aprender:

• No cualquiera puede ser tu franquiciatario, Ray buscaba gente comprometida, con responsabilidad y que cumpliera los estándares de calidad; toma en cuenta que es la reputación de tu negocio la que está en riesgo.
• “Los contratos son como los corazones, están hechos para romperse” – Ray Kroc. Esto no necesariamente tiene que ser así, sobretodo si te asesoras con un abogado especialista que te explique cuales son tus derechos y obligaciones, pero sobre todo que entienda cuales son tus expectativas de negocio.
• Registrar tu marca y tus invenciones. Esto hubiera hecho la diferencia para los hermanos McDonald, ellos hubieran podido asegurarse que su esfuerzo y perseverancia se convirtiera en ganancias y sobre todo que nadie más se las robara.
• No confiar en la palabra de alguien. Para proteger tu emprendimiento lo mejor es dejar todo por escrito; al final de la película Ray les prometió a los hermanos regalías de por vida, pero su error fue confiar en él y no plasmar esta promesa en un contrato.

Recuerda que tu perseverancia puede estar en riesgo si decides dejar todo al aire y no blindarte jurídicamente. No dejes que alguien más sea dueño de tus sueños y proyectos.

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