Hemos acabado con 1 millón 729 mil especies del planeta, los ecosistemas se deterioran velozmente y aún no encontramos una fórmula para contrarrestar todo este daño. La contaminación ambiental ha llegado a un punto crítico.
El modelo capitalista que nos rige desde hace décadas ha facultado a las empresas para contaminar los océanos sin ningún tipo de sanción. Afortunadamente existen emprendedores que han revolucionado este paradigma empresarial.
Conciben la economía como ciclos circulares donde ayudan a regenerar ecosistemas naturales, reactivan la economía local y apoyan a emprendedores rurales para que la red de personas comprometidas con el medio ambiente crezca cada día más.
Karüm es una empresa ODS y B creada en Chile en el año 2012 que se dedica a la fabricación de lentes de sol de alta calidad y diseño increíble, hechos con los residuos plásticos que contaminan los mares.
Las redes de pesca plásticas inundan los mares de la Patagonia. Karüm trabaja con emprendedores locales que se dedican a la recolección de plástico nulos 6, con el cual están hechas las redes.
Este plástico es enviado después a Italia, donde se le da el tratamiento adecuado que finalmente permite utilizarlo para producir anteojos con diseños innovadores y ya están presentes en países de Europa, Estados Unidos y Chile con 20 puntos de venta físicos.
Sin duda alguna es una forma increíble de reciclar, ya que se obtiene un producto único y de alta calidad que representa una cadena de producción sustentable y benéfica para las aguas chilenas.